Entrevista al actor: Adrian Alarcon
¿Cómo podrías describir tu infancia?
Diversa o como una gran patada de lanzamiento al viaje.
Estudios Universitarios
Licenciado en Ciencias de la Comunicación por el Tecnológico de Monterrey, tengo una especialidad en teatro Shakespeariano por la Real Academia de Arte Dramática de Londres, soy maestro certificado de yoga por el Bikram College of India, estudio medicina tradicional mexicana con la Contínua Tradición Tezkatlipoka y sigo en constante formación teatral desde lo corporal con Nora Manneck y Nora Fernández, sumándole talleres con Lola Lince, Jef Johnson, Hebe Rosell, y Tadashi Endo.
¿A que edad descubres que actuar es tu vocación?
No sé. Me recuerdo bailando en escena desde preescolar. Siempre ha estado ahí. Aunque considero mi debut profesional el montaje “Pericles” de Shakespeare, que dirigió Nona Sheppard en el teatro John Gielgud en 2006.
¿Qué opinión tuvo tu familia al respect?
Rotunda negación… (Risas) O casi. Sortear ese obstáculo también fue una gran escuela. Ahora mi padre es productor asociado en mis obras y asistimos frecuentemente al teatro.
Oportunidad de actuar profesionalmente
Bueno… las oportunidades pueden llegar o no. Si llegan, hay que estar atentos para cacharlas. Si no, hay que construir lo propio.
Cuando tengo tiempo libre, prefiero ir al teatro.
Trabajo en Teatro
Ha sido una experiencia diversa. Pero por algo volvemos y volvemos y volvemos y seguimos apostándole al teatro. Por la posibilidad de que pase algo, de que nos enganchemos emocional o energéticamente y seamos cómplices, o de que nos atraviesen y estrujen las tripas. No sé.
Proyectos a futuro
¡Ahora mismo! Estamos los miércoles a las 9pm en el Foro Shakespeare con Surrealismo, unipersonal de Nora Fernández que lleva más de 6mil funciones, y del cuál ahora soy productor. En junio estrenaremos “Yo soy dios o podría serlo sin ningún problema”, nuestra próxima producción en el Shakespeare, dirigido por Juan Carrillo, y en octubre “Salimos del mar y soñamos el mundo” dirigido por Nora Manneck.
¿Qué personaje te falta por interpretar?
Uno de mis primeros maestros fue Germán Robles. Recuerdo que en su momento me impresionó mucho que nos confesara que, con toda su trayectoria (100 películas, quién sabe cuántas obras de teatro, telenovelas, etc.) no había terminado de aprender. Cada obra y cada personaje es una escuela, Hasta ahora no tengo contemplado detenerme… ya veremos más adelante.
Ahora lo que siento es que si el Universo me da chance de seguir en este plano hasta los 120 años, seguiré teniendo personajes que interpretar.
En la faceta de productor, ¿qué has realizado?
Monte Calvo (de Jairo Aníbal Niño) y Buenas Noches Beatriz (de Julio Gini) dirigidas por Alejandro Aguirre; Después del Fin (de Dennis Kelly) dirigido por Nora Manneck; El Hombre sin Adjetivos (de Mario Cantú) dirigida por Jesús Díaz y Paola Izquierdo. Producción ejecutiva de Ricardo III (guiño) de David Gaitán y Surrealismo, de Nora Fernández. Próximamente estrenaremos como productor/actor Yo soy dios o podría serlo sin ningún problema (de Jaime Coello); y Salimos del mar y soñamos el mundo (de Felipe Rodríguez).
¿Cómo llega el yoga a tu vida?
Por curiosidad… Y Bikram Yoga llegó en Londres, mientras estudiaba allá. Una compañera me invitó a una clase y no he parado desde entonces.
¿Qué te ha dejado el yoga?
Una base, un punto de partida y un eje.
¿Cómo actor o modelo, te ha tocado realizar un desnudo artístico?
¿Han leído “La civilización del espectáculo” de Vargas Llosa? Tiene un capítulo titulado “El fin del erotismo”. Estoy de acuerdo con él. Por lo demás, el actor debe ponerse a sí mismo al servicio de la obra, eso lo aprendí con “Después del Fin”.
Cada quien es libre de elegir sus objetivos y estrategias.
¿Cómo te defines en tu personalidad?
Al día de hoy, creo que la personalidad es una herramienta de supervivencia que, consciente o inconscientemente elegimos ponernos como máscara(s) ante el mundo. Y la escencia de lo que somos sigue siendo un gran misterio. Si de mi personalidad hablamos, creo que soy serio, pero infantil, pero un espejo crítico, pero solucionador, pero introvertido, pero mejor le preguntamos a las personas que conviven conmigo, ¿no?
¿Cómo defines tu carácter?
Adaptable a las situaciones y circunstancias. Al menos, eso intento.
¿Qué te molesta/enoja?
La humanidad. Eso. Y mucho. También la amo, profundamente, aunque amo más a la naturaleza, definitivamente no soy antropocentrista. Y sin embargo, hago teatro.
¿Qué te hace llorar?
Soy irremediablemente chillón y me encanta; es de familia… ¿qué le vamos a hacer?
¿Qué tipo de lectura te gusta?
Sí. Leo mucho teatro, sobre todo cuando estoy buscando obras nuevas para arrancar viajes. Procuro leer la noticias en medios de distintas corrientes todos los días. Leo mucho de técnicas corporales y anatomía para el movimiento. Y si se trata de esparcimiento, me gusta el suspenso.
De todos los actores con los cuales has compartido escena, ¿a quien le guardas un gran recuerdo?
Grandes recuerdos, todos. Muy buenos… ¡y muy malos!… pero grandes, sin duda. Todavía extraño mucho a Oscar Alejandro Aguirre… así es la vida, caray.
De todos los personajes que has realizado, ¿cual ha sido el más difícil?
Afortunadamente, siempre que tengo la sensación de estar trabajando un personaje “facilito”, la vida (o mis directores y compañeros) se han encargado de mostrarme mi error. No volvería a ponerme en el estrés corporal que representó Ricardo III (guiño) de David Gaitán. Lo hice, lo agradezco, y paso a otra cosa. Volvería a hacer el Molière de Sabina Berman pero en unos 20 años, ya con el peso propio de la edad.
¿En que cree Adrián Alarcón?
Creo que mis creencias no tienen importancia más que para mi. Y que en realidad tenemos certezas sobre el 0.00001% del Universo, lo demás son creencias.
Pasatiempo favorito
¿Quién tiene tiempo para pasatiempos? ¿Ven lo acelerada que está la vida?
Bueno… en honor a al verdad… sí procuro darle un descansito a la neurosis echándome en el pasto de algún parque. A veces. Pocas veces. Tendría que descansar más, lo sé…
Twitter: @adrian2307
Fotos por: Roberto Blenda